La covid continúa evolucionando y ya se han detectado nuevas subvariantes del virus original en algunos países europeos. En el caso de España, la mayoría de casos confirmados corresponde a las variantes BQ.1 y BQ.1.1, que proceden de ómicron.Esta nueva variante, caracterizada por su rápido crecimiento, ha pasado a denominarse popularmente y a viralizarse en redes sociales desde Alemania como ‘perro del infierno’, debido a su rápida transmisión y mayor capacidad de contagio.
Perro del Infierno es el apodo que recibieron los nuevos sublinajes de Ómicron, BQ.1 y BQ.1.1, cepas que desde finales de septiembre se mantienen en constante aumento principalmente en Europa y EEUU. Varios expertos alertaron en las últimas semanas sobre su potencial capacidad de evasión de los anticuerpos frente al virus. El nombre por el que se hizo popular en redes sociales es “perro del infierno” (en inglés Hellhound) y hace referencia al perro del dios Hades, dios de los muertos y del inframundo, también conocido como “Cancerbero” o “Cerbero”.
Quien desempeñó la complicada tarea de cuidar las puertas del infierno, y era el perro que vigilaba a los muertos para que no pudieran escapar y, al mismo tiempo, que los vivos no pudieran entrar al inframundo.
Como investigadores y científicos esperaban, los casos de contagios se elevan y de acuerdo a las estimaciones del ECDC, más del 50% de las infecciones por COVID serán por BQ.1 y BQ.1.1 a principios y mediados del próximo mes de diciembre. Y para principios de 2023, podrían representar más del 80% de los casos.
En México se han detectado hasta el momento 16 contagios con la cepa BQ.1 y BQ.1.1. De acuerdo con información proporcionada por Oliva López Arellano, titular de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, son pocos los casos y no es una variante que predomine en el país, “Hasta ahora no produce cuadros más graves, entonces tenemos muy pocos hospitalizados y seguimos tomando muestras, para tener un monitoreo y seguimiento de los indicadores todos los días”, aseguró Arellano.
Asimismo, la doctora aprovechó para exhortar a la población a no entrar en pánico y a que se sigan las medidas adecuadas para prevenir contagios.
Según Milenio, el Instituto Nacional de Medicina Genómica (INMEGEN) fue quien registró el primer caso de la variante “perro del infierno” en una mujer de 36 años, habitante de la Ciudad de México, mismos datos que fueron expuestos a través de la plataforma GISAID (Global Initiative on Sharing All Influenza Data),
Desde entonces aparecieron paulatinamente más contagios, dos mujeres en el estado de Nuevo León, dos hombres también de la Ciudad de México, otro varón y otra mujer en Baja California. Así mismo, se registraron 8 casos pero de la variante BQ.1.1. en la CDMX, 2 contagios en Yucatán, al mismo tiempo otras dos en la capital del país, dos mujeres del Estado de México y finalmente una en Chiapas.
Con base a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), los síntomas de estas subvariantes de Ómicron, BQ.1 y BQ.1.1 son muy similares a las otras variantes y al mismo COVID-19:
– Fiebre
– Escalofríos
– Tos
– Problemas para respirar
– Cansancio
– Dolor muscular
– Dolor de cabeza.
– Dolor de garganta
– Náuseas
– Diarrea
– Congestión nasal
Cabe recordar, que a pesar de que en México las medidas sanitarias se relajaron desde hace varios meses, es importante que los habitantes no las descarten por completo. La prevención de contagios se logrará con el uso de cubrebocas, el lavado de manos constante, la sana distancia, contar con las dosis correspondientes de las vacunas y mantenerse informado a través de portales oficiales.