Científicos de Austria han detectado un nuevo caso de gonorrea que se ha vuelto resistente a los medicamentos que normalmente se recetan para su tratamiento, lo que indica que la supergonorrea va en aumento. Esta es la segunda cepa de gonorrea resistente que se encuentra en el mundo en los últimos dos años.
Esta bacteria fue detectada en el mes de abril en un hombre que la contrajo, posiblemente en un viaje por Camboya. Esta cepa es conocida como Neisseria gonorrhoeae, que a lo largo de las décadas ha logrado «aprender» como evadir a los antibióticos y únicamente dos medicamentos suele ser efectivos: la ceftriaxona y azitromicina.
En 2018, los médicos descubrieron tres casos de gonorrea en el Reino Unido y Nueva Zelanda causados por una cepa que era resistente a ambos medicamentos al mismo tiempo. Los casos se remontan a viajes por el sudeste asiático y, en al menos un caso, la infección no se eliminó con los tratamientos disponibles.
Esto ha causado que algunos países, como Estados Unidos, recomiende que ya no se use la azitromicina como tratamiento de primera línea.
En un informe de caso publicado el mes pasado en la revista Eurosurveillance, los médicos parecen haber encontrado la primera cepa de gonorrea desde 2018 que presenta resistencia a ambos medicamentos.
La resistencia de la gonorrea a los medicamentos comunes para su tratamiento puede convertirse en un problema de salud pública en un futuro, pues aunque aún se detectan casos aislados, la infección difícil de tratar puede propagarse con más fuerza en un futuro.
