Leer nos permite volar, creer que por un instante la fantasía se transforma en realidad y nuestra imaginación se libera y dibuja una y mil imágenes, únicas, nuestras, irrepetibles. De pronto podemos encontrarnos en otro mundo, en otro país, en otra “cabeza”, en otra dimensión. Los libros nos hacen reír, llorar, emocionarnos. Nos abren la mente, nos sensibilizan, nos permiten descubrir culturas, paradigmas, mil y una historias. Nos dan vocabulario. El legado que nos dejan es invaluable.
El Día Nacional del Libro es una conmemoración de carácter cultural que se celebra en México cada 12 de noviembre. La festividad fue creada el 6 de noviembre del año 1979, bajo el decreto del entonces presidente José López Portillo, quien durante su gobierno, favoreció la educación y la cultura como una herramienta necesaria para el progreso integral de la nación.
¿Por qué se celebra el Día Nacional del Libro?
En nuestro país la celebración del Día Nacional del Libro nace como un homenaje a la figura de sor Juana Inés de la Cruz, nacida en México el 12 de noviembre de 1648 y quien fue una prodigiosa autodidacta, apasionada de las letras, la lírica y el teatro. Sor Juana Inés, también conocida como «la décima musa» o » la fénix de América», creció en un ambiente donde la educación y la curiosidad estaban reservadas únicamente para los hombres, por lo que su camino literario le resultó difícil y controvertido, siendo blanco de muchas críticas de carácter misógino en el México del siglo XVII.
Fue una gran defensora del derecho a la educación y la lectura para todos las personas. Su pasión hacia la cultura, las artes y las ciencias, la llevó a tener un gran reconocimiento, en toda hispanoamérica, como una de las más prolíficas amantes de las letras de nuestro continente.
¿Por qué es importante Sor Juana Inés de la Cruz?
Sor Juana Inés de la Cruz es considera como la primera gran poeta latinoamericana. Su estilo de escribir es valorado como el primer antecedente de los escritores hispanoamericanos de la ilustración. Sus influencias más importantes vinieron de parte de los escritores del Siglo de Oro Español, como Góngora y Lope de Vega, por lo que su obra está cargada de personajes complejos y situaciones que exploran sentimientos humanos que le hacen ser valorada como una majestuosa narradora.
Su brillantez atrajo admiración y también críticas, en gran parte por las condiciones sociales del momento histórico que le tocó vivir, sin embargo, esto no le impidió reflexionar acerca de sí misma y de su destino como mujer y monja. En muchos de sus escritos se han podido encontrar muestras de su defensa al acceso a la educación y cultura para las mujeres y a la igualdad entre ambos sexos, cuestiones por las que establece reflexiones filosóficas a lo largo de varios de sus escritos como en su obra El Sueño y varios sonetos de su autoría.
En nuestro país, su figura causa admiración entre los escritores más importantes de la literatura mexicana, por lo que es un referente constante en cuanto a la historia de la literatura se refiere. Celebrar un día dedicado a los libros y, que además de ello conmemore su nacimiento, es una forma de perpetuar en la memoria sus obras y su legado en la literatura hispanoamericana contemporánea.