El sábado 11 de mayo, la tranquilidad nocturna se vio perturbada por un acto de violencia dirigido hacia Alessandra Rojo, candidata a la alcaldía Cuauhtémoc. Un individuo, en un aparente intento de atentado, abrió fuego contra el vehículo en el que se desplazaba, desencadenando una ola de preocupación y denuncias.
El evento, capturado por una cámara de seguridad, revela el escalofriante momento en que el agresor, con vestimenta oscura y casco de motociclista, se acerca al automóvil de Rojo y dispara varias veces, desafiando la seguridad de la candidata y de quienes la acompañaban.
El incidente tuvo lugar alrededor de las 22:05 horas, mientras el vehículo se detenía cerca del domicilio de una mujer que había denunciado ser víctima de violencia, a quien Rojo se dirigía después de una reunión. La valentía de la candidata quedó evidenciada cuando, tras el ataque, ella y su equipo se dirigieron a la Fiscalía para presentar la denuncia correspondiente consciente del peligro, compartió imágenes de los impactos de bala en su vehículo, destacando la gravedad del incidente y la urgencia de tomar medidas adecuadas para garantizar su seguridad y la de otros candidatos en situaciones similares.
La situación se volvió aún más tensa cuando reveló que su padre había recibido amenazas un día antes del ataque, agregando un elemento preocupante a la escalada de violencia política en la región. La rápida respuesta de las autoridades, con la apertura de una investigación por tentativa de homicidio, refleja la gravedad del incidente y la necesidad de abordar enérgicamente estas amenazas.
En una conferencia de prensa posterior, no dudó en señalar responsabilidades políticas, atribuyendo el clima de violencia a las acciones del gobierno local. La seguridad de los candidatos y sus equipos se ha convertido en una preocupación primordial en un contexto de creciente polarización política y violencia en el país.