La Policía Quintana Roo detuvo a un individuo, identificado como Isidro “N”, quien fue denunciado por atacar sexualmente a una perra. A través del 911 se recibió una denuncia, en la que se informó de una persona maltrataba a un animal en la calle Petcacab, de la Colonia Rubí, de Chetumal.
Una de las parafilias más conocidas es la zoofilia o bestialismo. Este trastorno de la inclinación sexual supone la existencia de una atracción sexual consistente a lo largo del tiempo hacia otros animales no humanos. También llamada bestialismo en los casos en que el sujeto consuma sus fantasías, este trastorno tiene graves efectos en quienes lo sufren.
Al llegar al lugar, los oficiales hablaron con una mujer y un hombre que señalaron a Isidro “N”, como responsable de agredir sexualmente a su perrita, por lo que los oficiales procedieron a realizar su detención. El detenido quedó a disposición de la autoridad correspondiente, que determinará su situación jurídica, tras haber sido acusado como presunto responsable de delitos contra el ambiente y fauna.
La Policía Quintana Roo pone a disposición de la ciudadanía el número de emergencias 911 y denuncia anónima 089, para reportar cualquier maltrato animal.
Aumentan casos de Zoofilia en Quintana Roo
Rafael Rivero Aburto, presidente del Asociación Civil “Toda vida es importante”, informó que Othón P. Blanco, en lo que va del 2022, cuenta con cuatro casos de zoofilia, siendo esta incidencia la más alta que ha registrado este municipio. En entrevista, agregó que el caso más reciente fue el que se registró ayer en la colonia Rubí, en donde se logró detener a Isidro N, sujeto que fue tenido solo una semana después que se suscitara el de Uriel N.
Rivero Aburto indicó que estos casos, registrados en menos de quince días, se suman a los que aún se mantienen abiertos, y que se registraron durante el primer semestre del año, en las localidades de Calderitas y Francisco Villa. Al respecto de estos últimos, detalló que en el caso del sujeto detenido en Calderitas, el caso se mantiene estancado, en parte porque los testigos, al momento de testificar, se niegan a formar parte del proceso.