La calle no es un lugar seguro en época de guerra sin embargo, es el lugar donde los niños y niñas del mundo juegan. Un conflicto supone que la infancia no tenga espacios seguros donde jugar o que no pueda hacerlo con otros niños y niñas de su edad esto, inevitablemente, vulnera sus derechos y afecta a su bienestar.
La organización Save the Children informó sobre la situación en Gaza, en la que al menos 870 niños se encuentran desaparecidos, posiblemente atrapados bajo los escombros de edificios devastados por los bombardeos Israelíes.Destacó que el proceso de rescate se ha complicado debido a los ataques continuos de Israel y a la escasez de combustible para llevar a cabo las operaciones de búsqueda y rescate de niños y adultos que podrían estar atrapados entre los escombros.
Informes oficiales estiman que alrededor de 1,550 personas están desaparecidas, de las cuales 870 son menores.Save the Children también advirtió que el número de personas desaparecidas, incluyendo niños separados de sus familias, sigue aumentando.
La falta de acceso a la atención médica agrava aún más la crisis y los equipos de rescate han hecho sonar la alarma, ya que la interrupción del suministro eléctrico y la escasez de combustible ha impactado en su capacidad para atender a los heridos o recuperar cuerpos entre los escombros de las viviendas.La organización alerta que existe la posibilidad de que haya niños atrapados bajo los escombros que aún estén con vida pero con lesiones físicas graves, como aplastamientos, deshidratación o angustia mental extrema.
La mayoría de los heridos graves rescatados no pueden recibir tratamiento básico debido a la precaria situación del sistema de salud, que ha sido severamente afectado por los ataques.Hospitales han sido dañados, ambulancias han quedado inutilizables y la escasez de medicamentos, equipo médico y personal especializado significa que los hospitales que siguen funcionando apenas pueden brindar atención a los heridos.
Jason Lee, director nacional de Save the Children en los territorios palestinos ocupados, subraya que es inadmisible que, sin un alto al fuego y levantamiento del asedio impuesto por Israel, la ayuda no llegará a muchos de los menores en esta situación crítica.En total, cerca de 5,800 personas han perdido la vida a causa de los bombardeos israelíes en Gaza desde el inicio del conflicto entre Israel y las milicias palestinas el 7 de octubre.