“Llegó tomándose el vientre con las manos y pidiendo una habitación, pero nunca pensé que entró a dar a luz”, explicaba el encargado del Hotel Edén a la policía, luego que una mujer en situación de calle y enferma de sus facultades mentales, alumbrara y dejara se ahogara su bebé en el retrete. Juan Hernández se encontraba sentado frente al mostrador del lobby, cuando observó entrar a la mujer, “ de aproximados 30 años, delgada y con la ropa sucia”, comentaba a las autoridades, al mismo tiempo que dijo que al tratar de llamarla, esta respondió que sólo iba e baño, pero luego dijo tomaría una habitación.
“No era la primera vez que la había visto, camina muy seguido por aquí y siempre andaba en compañía de otras personas indigentes, pero ella no estaba bien de sus facultades, por eso la deje que pasara la noche aquí”, continuó narrando el encargado del hotel de la avenida Constitución.
Cuando la perturbada mujer entró serían cerca de las diez de la noche; por la mañana Juan volteo a ver el reloj viejo colgado en la pared, ya era medio día del sábado, así que se acercó a la habitación número 16 pues fue en la que ingresó al estar más cerca del Lobby. Apenas iba a tocar la puerta, cuando la figura pálida y encorvada apareció, salió apresurada, casi derriba a Juan en su huída.
“Yo no podía tenerlo” dijo mientras se alejaba, la puerta del baño quedó abierta y manchas de sangre asomaban en las losetas del piso, el encargado del establecimiento se acercó hasta el sanitario y pudo observar el pequeño cuerpo y parte de la placenta sobre el piso; “Traté de salir a buscarla pero ya había desaparecido”, dijo.
El producto estaba perfectamente formado, aparentemente tenía cerca de ocho meses de gestación, aunque el parto por los indicios encontrados pudo registrarse sobre el piso del baño, pero el bebé fue hallado dentro del retrete, y la madre ahora es buscada por las autoridades.
